¿Qué pasa con las series de televisión en España?
Hace tiempo que no me engancho a una serie española. Y no me extraña. No hay ninguna que aporte nada innovador. Todas son copias de sí mismas, con las mismas situaciones, mismas líneas argumentales, misma fotografía y todas carecen del más mínimo interés.
Todo lo contrario que las series estadounidenses. La mayoría de las que nos llegan son originales, tienen buenos guiones y buenos argumentos, incluso experimentan con planos atractivos, una fotografía original y buena música.
Y luego están esas buenas series, que surgen como un soplo de aire fresco y que no vienen del interesante mundillo de las series en Estados Unidos. Es el caso de Skins (que en España inspiró a la cutre, del montón, aburrida, desorientada y llena de malos actores Física o Química).
Skins es una serie británica sobre la vida diaria de un grupo de adolescentes, contada con mucha dureza; en Skins el consumo de drogas y alcohol es tan esencial como un buen desayuno. Pero lo interesante de esta serie es la manera en que se cuenta. Cada capítulo está dedicado a uno de los personajes, y la trama se centra en él o ella, sin dejar de lado a los demás protagonistas. El montaje de las escenas es muy bueno, la fotografía muy currada, la música muy adecuada... y hay escenas verdaderamente sorprendentes.
De momento he visto dos capítulos de Skins, pero creo que ya tengo a un personaje favorito. Se trata de Cassie, una chica anoréxica que vive un poco en su mundo y que está enamorada de un amigo que está coladito por la novia de su mejor amigo (como en un lío de culebrón).
Skins se emite los lunes a las 23:00 horas en Neox (canal de la TDT), y realmente merece la pena.
Os dejo un fragmento del capítulo de Skins centrado en Cassie.
Hace tiempo que no me engancho a una serie española. Y no me extraña. No hay ninguna que aporte nada innovador. Todas son copias de sí mismas, con las mismas situaciones, mismas líneas argumentales, misma fotografía y todas carecen del más mínimo interés.
Todo lo contrario que las series estadounidenses. La mayoría de las que nos llegan son originales, tienen buenos guiones y buenos argumentos, incluso experimentan con planos atractivos, una fotografía original y buena música.
Y luego están esas buenas series, que surgen como un soplo de aire fresco y que no vienen del interesante mundillo de las series en Estados Unidos. Es el caso de Skins (que en España inspiró a la cutre, del montón, aburrida, desorientada y llena de malos actores Física o Química).
Skins es una serie británica sobre la vida diaria de un grupo de adolescentes, contada con mucha dureza; en Skins el consumo de drogas y alcohol es tan esencial como un buen desayuno. Pero lo interesante de esta serie es la manera en que se cuenta. Cada capítulo está dedicado a uno de los personajes, y la trama se centra en él o ella, sin dejar de lado a los demás protagonistas. El montaje de las escenas es muy bueno, la fotografía muy currada, la música muy adecuada... y hay escenas verdaderamente sorprendentes.
De momento he visto dos capítulos de Skins, pero creo que ya tengo a un personaje favorito. Se trata de Cassie, una chica anoréxica que vive un poco en su mundo y que está enamorada de un amigo que está coladito por la novia de su mejor amigo (como en un lío de culebrón).
Skins se emite los lunes a las 23:00 horas en Neox (canal de la TDT), y realmente merece la pena.
Os dejo un fragmento del capítulo de Skins centrado en Cassie.
"Te gusto, te gusto, mira hacia arriba si te gusto, mira hacia arriba si te gusto...
Oh, mierda".
En España ahora se centran en enseñar los culetes de las jóvenes actrices para ganar audiencia... es lo que psaba en fama con muchos tíos... que asco...
ResponderEliminarParece buena serie, yo me sigo quedando con Pocoyo jaja
Ala, un besote capuyin!!
Hay una amiga mía que ya se ha visto todas las temporadas que han emitido en Gran Bretaña y es una auténtica enganchada, yo aún no la he visto, pero algún día de éstos empezaré.
ResponderEliminarNo sé si la has visto, pero Veronica Mars se merece un visionado tan sólo por el personaje que da nombre a la serie... un auténtico prodigio de los guionistas.