domingo, 23 de mayo de 2010

Respirando

Sábado de cansancio tras una noche sin apenas dormir por un cúmulo de acontecimientos: cumpleaños, fiesta, helado del Mercadona, música, madrugón para dar regalos, ronquidos...
Agujetas en los brazos por haber transportado el día anterior una tarta con tal cuidado que no se destrozara por el camino y un helado que no sobrevivió a los 30º.
Agujetas en las piernas, no sé de qué... ¿de esa forma extraña de andar moviendo las rodillas para que parezca que bailas canciones inbailables?

Lo mejor para curarse de todo esto... ¿sofá?
Curiosamente no... una propuesta de ir a dar una vuelta por el monte cualquiera en su sano juicio la habría rechazado en este estado. Yo acepté y no sé si fue el aire, el ambiente, los olores o qué, pero no había ni cansancio ni agujetas caminando por campos de trigo, frotándome las manos con romero y tomillo para perfumarme a lo natural, y respirando este aire que cada vez es más difícil de conseguir.

3 comentarios:

  1. paisagem muito diferente daqui do Brasil sou da amazonia mas essa floresta tambem é bonita.

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  2. Tu paseo por el monte me recuerda a mis tardes de domingo jugando al fútbol con mis primos (a veces, incluso en tacones!!) porque por muy cansada que esté prefiero ese momento de desconexión absoluta con los enanos que compadecerme de mis males en el sofá.
    La vida hay que vivirla ;)

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  3. Lo mejor pa curarse, es un sofá en el monte, hombrepordios Char!!!

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