Verano fatal

Ya he acabado todos los examenes (hasta septiembre...).

¿Latín? Tres horas y media de examen, casi me quedo pegado a la silla, intentando copiar cuando nos han camibado de clase, intentando dar sentido a una traducción imposible (Si recordando...)
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Comienza el verano.

¿Un verano fatal?
Esperemos que no. Planes que veo de momento para las vacaciones veraniegas...
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En primer lugar, y como principal prioridad, rodar mis dos nuevos cortos con Yolanda (¡!). El primero de ellos es con guión de ella, y trata sobre los remordimientos de una chica que perdió a su novio y sus amigos en un accidente de coche; el segundo será con mi guión, y será un corto de terror que tratará sobre un asesino de mujeres, y no digo más. Espero que nos lo pasemos tan bien como el año pasado rodando nuestro primer corto [aún me acuerdo de aquel Mira el marginado, que se ha enamoraaadoooooooo que tantas risas causó, o de aquella escena en el pasillo que rodé unas siete veces, o de los ataques de risa que tantos vídeos dieron, o de cuando intentamos hacer de mi madre una actriz...].

En segundo lugar esperar a que me llamen para trabajar en el área de servicio de Pina [si alguien de por aquí se va de vacaciones y pasa por allí, que pregunte por Charles]; han contado buenas anécdotas trabajando allí, y buenas visitas (Dover, Marea). A ver sis sacamos algunas pelillas...

En tercer lugar los dibujos de las Majas. Me explico. Cada año las Majas de fiestas de San Roque tienen que hacer un dibujo en la calle justo frente a su casa; es una tradición que lleva en el pueblo desde hace muchos años, y parece que la tradición desde 2004 es llamarme a mí para que hagas los dibujicos. Este será mi quinto año como dibujante oficial del pueblo, con dos encargos de momento con los que ya serán 9 los dibujos que he hecho en cinco años, sin contar todos aquellos en los que he participado secundariamente.

Mi primer dibujo de Maja. Desde aquel creo que he mejorado mucho... la experiencia es lo que tiene.

Además, tengo concertada y firmada una maratón friki con una amiga (Teresa, esta vez no te rajas) que consistirá en 24 horas completas viendo las versiones extendidas de las tres películas de El Señor de los Anillos, los dvd's con extras de todas las películas (tanto de vesiones extendidas como de versiones cinematográficas) y el dvd del concierto de la BSO de El Retorno del Rey. Si nos sobra tiempo ya lo rellenaremos con Star Wars o películas de Lina Morgan.

También aprovecharé este tiempo para escribir muchas ideas que me rondan por la cabeza (tengo un conjunto de relatos medio organizado que no se me escapa), para leer todo lo que no he podido leer a lo largo del curso (Un mundo sin fin), y para prepararme los exámenes de septiembre (siempre todo para el final, no sé cómo me las apaño).

A todo esto le añadimos sol, piscina, playa, algún viajecillo, fiestas de pueblo y alguna quedada con los filólogos (que yo no aguanto un verano sin veros) y ya tenemos ocupado el verano hasta los malditos exámenes de septiembre. ¡Ah, y tres días de visita a la EXPO!

¡Ay, filólogos! Cuánto os voy a echar de menos por aquí... y a los cafés, las horas libres, las risas, las conversaciones chorras, los ratos haciendo el monguis, los conciertos, las fiestas, las ralladas de clase...

Y, por cierto, ¡ya tengo cámara nueva! ¡Qué fotazas voy a poder enseñar cuando se acabe el verano, vas a ver tú...!

* * *

Os dejo con esta canción que me encanta de Nacho Vegas y Christina Rosenvinge, y que da título a esta entrada.

Te vi en un escenario intentando disparar
a este chico solitario, no me tengo que acercar,
tus ojos me encontraron en la última canción,
no sé si era una promesa o una premonición.

Te observo al descender y una extraña sensación después,
cómo poco a poco me voy empezando a encoger,
llegando a la ciudad la mujer del tiempo nos dirá
que a una primavera en calma siempre le sucederá un verano fatal.

No tenemos que escondernos alguien nos encontrará,
hacer siempre lo incorrecto es una forma de acertar,
la mañana nos recoge donde muere la ciudad,
yo buscando tu fuerza y tú mi debilidad.

Te vuelvo a escuchar en esa forma especial de hablar,
para ser un buen cantante tienes que desafinar,
hoy hace más calor y me tienes atrapado en tu rincón,
quien podría imaginar lo que nos iba a deparar un verano fatal.

Y aquí las noches llegan y nos pasan como un reactor
y todo lo que nace, nace casi como por error,
y las gaviotas chillan que ya está cerca el final de un verano fatal,
de un verano fatal.

Te pierdo entre la gente que ha venido a celebrar
que llega el presidente y dice que nos va a salvar,
veo pasos en la orilla y te vuelvo a encontrar
en el agua de rodillas cruzando hacia altamar.

Y hablamos del amor pero es la hora del adiós
y el viejo que no sabe nada con su acordeón
y al huir de la ciudad la mujer del tiempo nos dirá
que a un otoño desastroso siempre le precederá un verano fatal.